[Reseña] La cueva mágica

Nueva reseña de un juego de mesa para jugar con niños. En esta ocasión, se trata del nuevo juego de una editorial española que mencionamos hoy por primera vez en este blog: Editorial Darbel. Esta editorial tiene otros juegos como Tortilla de Patatas o RallyRas, entre otros.

El juego a reseñar es La cueva mágica. Un juego ambientado en Alí Babá y los 40 ladrones, indicado para jugar con niños a partir de 6 años, y que podríamos categorizar como juego de memoria.

Datos básicos

• Editorial: Darbel
• Autores: José María Bellostas (creador), y Darío Muel (ilustrador).
• Duración de una partida: 30 minutos
• Edad: +6 años
• Cantidad de jugadores: De 2 a 5.
• Tipo de juego: Memoria
• Dificultad: hay 3 niveles (básico/junior, medio y avanzado)

¿Qué contiene el juego?

• Cueva Mágica
• 40 Fichas grandes
• 20 Fichas pequeñas
• 5 Fichas de personaje
• 10 Fichas de Morgana
• 15 Fichas de zanahoria
• 1 marcador de jugador inicial
• 1 dado
• Instrucciones

¿Cual es el objetivo del juego?

Ser el jugador con más puntos al acabar la partida.

Estos puntos totales se cuentan al terminar las 4 rondas que tiene una partida, y dependerá del número de tesoros (que suman) y de ladrones (que restan) que tenga cada jugador. A continuación explicamos la mecánica.

¿Cómo se juega?

Como preparación: se introducen las 20 fichas pequeñas de tesoro en la cueva y se cierra. Las 40 fichas grandes se colocan alrededor de la caja. Cada jugador recibe una ficha de personaje, tres zanahorias, y dos fichas de Morgana.

Los tesoros de las 20 fichas pequeñas, están replicados en las fichas grandes de fuera de la caja.

Empieza el primer turno. El primer jugador se descarta de una ficha de zanahoria, agita la caja y al grito de “Abrete sésamo” la abrirá. Todos los jugadores tienen que fijarse y memorizar las fichas de tesoro del interior de la caja, y al poco rato el primer jugador volverá a cerrar la caja.

A continuación este jugador decidirá si juega su turno como Alí o como Cassim:

• Si juega como Alí, lanzará el dado y cogerá tantas fichas grandes de tesoro como el número que haya salido. Lo hará teniendo en cuenta las fichas que ha visto antes dentro de la caja.
• Si juega como Cassim, deberá jugar como ese personaje para todo el resto de La Ronda, y se descartará de una zanahoria para indicar que en la siguiente ronda será el jugador inicial. Este personaje implica tirar el dado 2 veces. Sumará el resultado y girará tantas fichas grandes como el resultado sacado. Esta es la opción ideal cuando no se recuerdan más tesoros o cuando se quiere trolear a otros jugadores.

De esta manera termina la ronda, y se abre la cueva para comprobar resultados. Cada jugador comprueba sus fichas grandes de tesoro. Si en la caja están los tesoros del mismo símbolo, se quedan las fichas grandes por el lado del tesoro, como puntos positivos. Si tienen tesoros grandes que no están en la caja, se quedan las fichas grandes por la cara del ladrón, que restará puntos.

Durante la partida además cada jugador podrá ir utilizando sus dos fichas de Morgana. Si un jugador cree que otro jugador tiene una ficha de tesoro equivocada (es decir, ese tesoro realmente no estaba dentro de la caja, ahora tapada), puede colocar una de sus fichas de Morgana encima, dejando así ese tesoro “marcado”. Al final de la ronda, cuando se compruebe ese tesoro, puede quedárselo si estaba en lo cierto. Pero si resulta que realmente NO estaba el tesoro en la caja, perderá su ficha de Morgana, y se la quedará el contrincante.

Después de 4 rondas termina la partida y se cuentan los puntos. Cada tesoro obtenido suma +1 punto, y cada ladrón y ficha de distinto color al tuyo resta -2 puntos.

Así funciona una partida de nivel junior. Los niveles medio y avanzado funcionan igual, pero tiene más variantes a la hora del recuento final de puntos, y otras diferencias que podréis ver jugando al juego.

Comentarios

Respecto a la calidad de los materiales, es muy buena. Las fichas son de cartón grueso, y el destroquelado es muy cómodo. El diseño de la caja, que forma parte del juego enteramente, está muy bien pensado.

La temática me parece atractiva, con este cuento clásico de Alí Babá y los cuarenta ladrones.

Como sabéis, preferimos los juegos que hacen pensar a los niños, y no los que son puro azar (lo siento, oca). En este caso, ejercitar la memoria (que por cierto, también nos viene bien a los “mayores”). Y no de manera tan sencilla como un Memory de cartas típico, si no que, gracias a sus diferentes niveles de dificultad, tiene variantes para que además de memorizar, tengamos que pensar algo de estrategia, cuándo usar las fichas de Morgana, etc.

Por finalizar, este juego ha servido para conocer una nueva editorial que se preocupa por los juegos de mesa para jugar con niños, y además, española, así que… ¡buena noticia!.

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